miércoles, 28 de agosto de 2019

230 años de la exploración de la Cueva del Higuerón

El 26 de agosto de 1.789 el contramaestre de las Reales Obras del Puerto de Málaga, Cayetano Bresciani, en compañía de un maestro cantero, un dibujante y una cuerda de 16 presos, que a su vez eran  trabajadores del puerto,  se adentraban en la cueva del Higuerón, en el llamado Cantal Alto de Rincón de la Victoria,  con la intención de desvelar sus secretos [21], empresa que les llevo dos días completar y que estos días cumple los 230 años en lo que es seguramente la exploración con levantamiento topográfico más antigua de las conocidos en España [25].

Adaptación de las galerías para el uso turístico y recreación de un lago.


El revuelo en la Málaga portuaria del siglo XVIII vino a cuento de unos cuadernos publicados bajo el epígrafe "Conversaciones Históricas Malagueñas" y de la mano del presbítero de la diócesis, que uso el seudónimo de su sobrino Cecilio Gracia de la Leña, para tal empresa. Entre las páginas 113 a 120 desgrana dos "conversaciones" , una sobre la caverna del Higuerón y sus pasillos y puertas que ocultan un tesoro y otra de la ocultación de Marco Crasso en año 84 a. C.   precisamente en esta caverna [1 y 2].

Para el enigmático escritor J.M. Xavarino [27] el vocablo "Higuerón" hace referencia a un lugar "que tiene agua abundante" y no al hecho de que en la boca de la cueva viviera hospedada un ejemplar de este árbol frutal, en su versión silvestre.  Pero claro está que la cueva ha recorrido, de manera documentada varios nombres a saber.

Las publicaciones.
En los papeles inéditos de Fray Luis de Milla y Suazo, alrededor del 1740 ya se menciona la cueva del Higuerón en sus "Anotaciones para la historia de Málaga y su obispado" que según dice supo del tesoro por un moro que servia a su familia en Oran (Argelia), de donde era oriundo.
García de la Leña, que usa la información de Suazo, y de nuevo habla  en 1789 de cueva del Higuerón y además lo publica.
En  agosto de 1789 el Gobernador de Málaga manda que la cueva se explore y se esclarezca todo sobre ella. Bresciani y su equipo emplean los días 26 y 27 para ello.
Años después, en  1833 otro gobernador de Málaga volvió a mandar su exploración a raíz de un artículo en el que se hablaba de una gran caverna con puertas y puentes sobre precipicios y abundantes restos de ollas de época de los moros. El artículo, una invención seguramente a partir del de García de la Leña,   reproducía grabados del Tajo de los Gaitanes.
Madoz en su diccionario de 1850 habla poco y repite lo sabido.
Entre 1845 y 1875  se instala en ella Antonio de la Nari "El Suizo". Se hizo tan popular a su muerte por un barreno que la gente empezó a llamar la cueva como la del Suizo.
Francisco Bergamín  en 1874 habla de una excursión a la cueva del Suizo.
Más tarde, en 1890, tiene lugar otra ajetreada visita por parte de un grupo de ilustres malagueños: Rafael Mitjana, arquitecto municipal,  y Manuel Altolaguirre, periodista de la Unión Mercantil, entre ellos y capitaneados por Martínez Barrionuevo quien se nombra  "presidente de la sociedad de exploradores de la cueva del Higuerón".  La visita queda refleja en un relato del mismo Manuel Martínez Barrionuevo en la Revista El Museo, (Barcelona)  de ese mismo año.


En 1.888  se produce la compra por Enrique Laza con la finalidad empresarial de extraer guano de murciélago como abono para las tierras de la comarca.

Puíg y Larraz (1896) "Caverna y simas de España", pág. 214-215)
Málaga. - CUEVA DE LOS CANTALES, CUEVA DEL HIGUERÓN.- Vasta oquedad que está situada á unos 500 metros al N. de la torre del mismo nombre, á unos 12 kilómetros de Málaga y en las cercanías de El Palo. La boca, próximamente redonda, tiene unos cuatro metros de diámetro y se haya en parte obstruida por los derrubios de la parte superior de los Cantales: desde la entrada arranca una galería en pendiente, y á unos cinco metros de profundidad se encuentran las bocas de dos galerías. Una completamente impracticable, y la otra, por la que puede marcharse con alguna dificultad (este se dirige al SO., según el Sr. Rute, y al N. según Madoz), el paso es estrecho y de escasa altura, aunque no muy largo, pues escasamente tendrá unos 30 metros; al final se encuentra una espaciosa y ancha cavidad, de donde arrancan distintas galerías de anchura varia y alturas desiguales. Una alta bóveda cubre aquel recinto, en que las estalactitas y estalagmitas forman caprichosos grupos. El agua brota por todas partes. El suelo presenta, concrecionada por el fango calizo, una espesa capa de excremento de murciélagos, que se encuentran en gran numero anidando en las grietas de las paredes ó adheridos al techo. No es posible llegar al extremo de  ninguna de las galerías que parten del salón central, pues todas se estrechan de tal manera, que hace imposible seguir adelante. En esta cueva supone Medina Conde que estuvo oculto Marco Licinio  Crasso, huyendo de las persecuciones de Marco y Cinna contra los partidarios de Sila, según cuenta Plutarco.
Manuel Laza Palacios dice en sus diarios de excavaciones [29]:  "Desde el verano de 1951 en que comencé la exploración y la excavación de la cueva ". Y  que había comprado a su tío Enrique por el pecio de una peseta y ademas le regalan un ejemplar del libro "Conversaciones históricas malagueñas".

En la actualidad es turística y visitable bajo la denominación de  Cueva del Tesoro.
Con este historial la versión del Sr. Xavarino mejor la dejamos de momento en suspenso, por original que nos parezca.

Lo de Marco Crasso es poco probable.
Es otra de las afirmaciones tomadas con pinzas que han calado a base de repetirse mucho. Plutarco nos dice que estuvo en una cueva de una heredad con cultivos y servicios y en este pedregal no había nada de eso. Para mi que estaba más cerca de la Cueva de la Hedionda, junto a los baños romanos de Casares. Esa cueva es amplia, con varios salones, cerca del poblado romano de Lacipo, en una zona de viñas y valle de cultivo. Una gran villa romana apareció, hace unos años, en la barriada de Manilva, en la costa y que bien podría ser la heredad de Vivio Pacieco de la que habla Plutarco. En fin un lugar mucho más propicio y "romanizado" que no esos lúgubres agujeros estrechos y sombríos que debía ser la cueva antes del desescombro iniciado por el Suizo y terminado por Laza Palacios. Con la caída de Cinna Marco Crasso reunió un ejercito y arraso Málaga ¿como agradecimiento? , antes de partir hacia África. No parece un comportamiento lógico desairar a sus benefactores.

Y que me dices del tesoro de Tasufín.
La rocambolesca historia del tesoro y los personajes intervinientes dan pie más para una chanza que para una historia minimamente plausible. Desde luego don Manuel tenia una fe ciega en esta leyenda y puso todo su saber y mucho más en la empresa. Sin embargo leyendo sus libros y artículos con la perspectiva del tiempo te quedas perplejo con las invocaciones marianas, los radiestesistas clandestinos y las echadoras de cartas. Aquí valió de todo para buscar esa quimera [13, 14 y 15].
La erudición de Don Manuel era tal que podía pergeñar una teoría con sus muy amplios conocimientos de textos clásicos y sus recursos literarios, pero sin ninguna prueba material y cómo no arrimando el ascua a su sardina para hacer más creíble la teoría.  Era un prestidigitador que con unos gramos  cenizas y una piedra curva, de las muchas de la cueva, creaba un entorno equivalente a la gruta cretense de Psycro, morada del dios Zeus [28]. Dos escenarios ni remotamente comparables a tenor de la magnitud de la cueva griega y de la cantidad de restos arqueológicos allí encontrados y por supuesto de los cientos de páginas escritas por los clásicos poniendo en antecedentes lo que era aquello, como resulto ser. Aquí Astarte ni está ni se le espera por mucho que el paisaje cretense y el de la Axarquia sean primos hermanos.

Origen marino versus Espeleogénesis inversa
El origen marino de esta cueva "única en Europa" es otra de las fantasías urdidas  en torno a ella que nadie parece estar dispuesto a desmentir.  Eminentes geólogos a los que yo no quiero rebatir aquí se empeñan en mantener el entuerto.
Pero hoy con Internet es muy fácil hacerse con las últimas novedades literarias y científicas y con el correo de algún profesor universitario ajeno al debate local para establecer otro horizonte teórico con el que explicar el origen de una cueva tan singular.
Alexander Klimchouk [30 y 31]   y otros científicos del karst han demostrado ampliamente la teoría de la espeleogénesis inversa o hipogénia para explicar el origen, en el ámbito de un acuífero confinado,  de esta magnifica cueva, que sin duda se merece una revisión desde este nuevo punto de vista [32]. Los episodios eustáticos del litoral, para la evolución de uno o varios acuíferos confinados en el Cantal Alto,  explicarían perfectamente el origen y evolución de sus amplias galerías y pozos en los que cualquier persona puede observar hoy sus formas de feeder, outles y demás morfologías ya descritas en lugares tan próximos a nosotros como Mallorca [34] y Murcia [33].

La ocupación humana.
La secuencia cultural de ocupación prehistórica de la costa oriental, en la que se encuentra la cavidad, ha llevado a muchos investigadores a considerar la zona como de gran interés por estos yacimientos de cazadores, recolectores y pescadores que vivían en torno a la bahía de Málaga, a veces a pie de playa o en las abrigos de los rebordes calcáreos situados en este [24].  Llegando a afirmar que estos yacimientos,  en su conjunto,  son el testimonio más importante de las tempranas ocupaciones humanas ligadas al nacimiento de la cultura europea [24, pp-420]

En 1918 el abate Breuil, acompañado de Miguel Such, la visitó descubriendo sus pinturas rupestres. Se trata de unas pocas figuras en rojo de difícil interpretación. Entre ellas se pueden distinguir varias cabezas de cápridos, y quizás los cuartos traseros de otro animal. Otra figura en forma de V o cornamenta, tiene similitud con la representada en una azagaya del Parpalló Magdaleniense Ill. Sin embargo, Jordá las considera Epipaleolíticas.

En 1956 Giménez Reyna y Manuel Laza Palacios excavan en la sala de entrada de la cueva, zona con luz natural, y que presentaba un relleno de unos 10 metros, aunque no había ningún nivel intacto debido a las perforaciones que se hicieron anteriormente en esta cueva. La cerámica recogida presenta como característica el vaso ovoidal, de diferentes tamaños y asas de diversas formas: de cinta, de mamelones de lengüeta, de anillo vertical. En los vasos de gran tamaño es típica la decoración de impresiones digitales o incisiones transversales en el borde, y cuatro asas -dos verticales de perforación horizontal y dos de mamelones con cordones- formando onda de asa a asa. Además aparecen vasos esféricos, lisos, con dos asas verticales próximas al borde, y vasos globulares con cuello indicado. Apareció un vaso ovoide con asa-pitorro y en su parte opuesta un asa de túnel vertical.

La industria ósea es escasa, destacando un fragmento de arpón con una sola hilera de dientes, y un fragmento de azagaya. En sílex aparecen perforaciones, raspadores, buriles realizados sobre truncaduras y útiles de borde rebajado entre los que destaca una punta de la Gravette. La cronología de los restos encontrados en esta cueva abarca un amplio período. Pilar López y Carmen Cacho creen ver en principio un nivel Perigordiense, aunque con grandes influencias del Auriñaciense por la presencia de raspadores sobre hojas estranguladas. El Solutrense está representado por una punta de aletas y pedúnculos, aunque Fortea la considera Calcolítica. El Magdaleniense aparece sobre todo por el arpón y el alto porcentaje de buriles, así como por sus pinturas rupestres.
Respecto a los niveles cerámicos, según Navarrete Enciso corresponde al Neolítico Final. Se piensa que esta cueva fue habitada también en la Edad del Bronce, llegando incluso a la Edad Media, ya que han aparecido cerámicas árabes. También se recogieron restos humanos, lo que indica que fue utilizada como sepultura en el Neolítico Final o en el Eneolítico.
El material procedente de la excavaciones de la cueva se enviaron a Julio Martínez Santa Olalla para su estudio. Finalmente acabaron en el Museo Arqueológico Nacional [35].
Se trata de un conjunto abundante:
724 fragmentos de cerámicas, de ellos
343 permiten estudio de forma o decoración y
18 vasos completos o reconstruidos.


Estadística de las pinturas estudiadas.

Recuento del trabajo de inventario realizado en 1984 [24]

CUEVA
TOTAL
AVE
URO
MANOS
CABALLO
PECES
CÉRVIDO
MANCHAS
 Y LÍNEAS
VICTORIA
8
1
1
1



5
HIGUERÓN
42


1


1
40
TESORO
13



1
1

11

63
1
1
2
1
1
1
56

Grafitis
En la cueva se conservan algunas pintadas  (graffitis hechos a lápiz)  En uno se puede ver el nombre de Miguel Such y su hermano Miguel junto a los hermanos Tallefer del año 1919 y otro de origen extranjero y muy poco legible.
Otro curioso  es del año 1854 y habla de la Sociedad de exploración que se creo para el estudio de la cueva y en la que parece estaban  algunos industriales malagueños de la época liderada por el suizo Antonio de la Nari.
En otro lugar de la cavidad se puede ver la firma del mismo H. Breuil.

Mal verde
Los estudios del año 1984 ya desvelaron la presencia del MAL VERDE en las cercanías de las pinturas rupestres por lo que los investigadores se atrevieron a recomendar la bajada de la intensidad en la iluminación y la necesidad de restringir las horas de encendido de las misma [24].
Hoy día se sigue trabajando en ello y aunque no esta erradicado del todo al menos se controla que no afecte a las pinturas.



NOTAS Y REFERENCIAS:

  1. GARCÍA DE LA LEÑA, Cecilio, (1789), "Noticia de la gran cueva y subterráneo espacioso del Higuerón, en los Cantales de Málaga", en Conversaciones históricas malagueñas-, Málaga.- Pág. 117-120.-
  2. GARCÍA DE LA LEÑA, Cecilio, (1789), -- Historia de la cueva junto a Málaga donde se ocultó Marco Craso--,  en --Conversaciones históricas malagueñas.--Málaga , Pág. 113-118.-
  3. BERGAMÍN GARCÍA, Francisco, (1874), -- Viaje de exploración a la cueva del Suizo-- ,
  4. El Museo, 29 de Noviembre
  5. MARTINEZ BARRIONUEVO, M. (1890) -- Andalucía. Costumbres y recuerdos.
  6. Tomo II, Ed. Ramón Molinos, Barcelona. cap. XXI-XXII; pág. 159-171.
  7. PUIG Y LARRAZ, GABRIEL (1896) "Cavernas y simas de España".  Pág: 214-215. Madrid.
  8. DÍAZ DE ESCOBAR, Narciso, (1917), ---La cueva del Higuerón.--- 
  9. extractados de los -- Anales de Málaga--, Imprenta de J. Azuaga, (Málaga)
  10. BREUIL, H.  (1920)  -- Nouvelles cavernes ornées paleolithiques dans la province de Málaga.  
  11. L Anthropologíe», tomo XXXI, Paris.
  12. BRREUIL , BURKIT Y  PALOP (1925) -- CUATROCIENTOS SIGLOS DE ARTE PARIETAL.
  13. SANZ CAGIGAS, F. (1953) Se está buscando un tesoro en la cueva del Higuerón, cerca de Málaga. Varios radiestesistas afirman que hay oro dentro de un recipiente de plomo.  Diario Sur, 22 de agosto de 1953. Pág. 3-4. Málaga.
  14. XXX-- (1955) -- Interesante hallazgo arqueológico en la histórica Cueva del Higuerón.--Parece que se confirma la famosa leyenda del tesoro. --
  15. Diario Sur, 27 de julio de 1955, Málaga. Pág.-1.
  16. LAZA PALACIOS, Manuel (1957)--Un sabio arqueólogo en la Cueva del Higuerón.-- Diario Sur, 3 de octubre de 1957. Málaga. Pág. 3.-
  17. GIMÉNEZ REINA, Simeón, y LAZA PALACIOS, Manuel, (1962), -- Informe de las excavaciones en la Cueva del Higuerón o del Suizo--,
  18. Noticiario Arqueológico Hispánico, Tomo VI, (cuadernos, 1-3), Madrid; Pág. 60-67, y 10 pp. (1 plano, 10 lam.).-
  19. LAZA PALACIOS, Manuel, (1967), -- El tesoro de los cinco reyes---, Gráficas San Andrés, 95 pag. (1 plano, 7 fotog., 1 lam.), (Málaga)
  20. LÓPEZ GARCÍA, Pilar, y CACHO, Carmen, (1979), --La Cueva del Higuerón (Málaga): Estudio de sus materiales-- Trabajos de Prehistoria, vol. 36, pp. 11-81 (1 mapa, 1 plano, 27 fig., 7 fotog., 73 gráficos), (Madrid)
  21. CABRERA PABLOS, Francisco R. :   (1990) Cueva del Higuerón, La: historia de una leyenda.  Revista JÁBEGA número 67 (1990), páginas 23-27. CEDMA-Málaga.
  22. VARIOS: (1991): -- Cueva del Tesoro. Piedra,agua, fuego. Rincón de la Victoria (Málaga).-- Rev El Oriental. (Número especial mayo, 1991)
  23. BERROCAL PÉREZ, JOSÉ ANTONIO  y  WALLACE MORENO, LORETO (2002): “Guía de las cuevas de Málaga”, pp, 48,  Biblioteca Popular Malagueña, nº 90.Diputación de Málaga.
  24. CANTALEJO DUARTE, P.  y  OTROS (2006) "Arte rupestre paleolítico en el complejo de cuevas del Cantal en el Rincón de la Victoria (Málaga). Cuevas de la Victoria, el Higuerón y el Tesoro".  Rev. Mainake, XXVIII, pp-399-422. Diputación de Málaga.
  25. GONZALEZ RÍOS, J.M. y MIRET PÉREZ, F. (2007) La cartografía de cavidades españolas de los siglos XVIII y  XIX”. Boletín del Museo Andaluz de la Espeleología, nº 16; pág. 7-28. Granada.
  26. J.A.B. (2015) Un grafiti de Miguel Such en la Cueva del Higuerón.   http://www.andaluciaexplora.blogspot.com.es/2015/02/un-grafiti-de-miguel-such-en-la-cueva.html
  27. XAVARINO, J. M. (1995) "Las raíces de Iberia. Málaga primitiva en la toponimia de España y Portugal. Estudio de la toponimia prerromana". Ed. Edinfor. Málaga. PP 249.E
  28. COTTRELL, L. ( 1953) "El toro de Minos". TPP Ed. PP-232. (Existen varias ediciones y reediciones) 
  29. LAZA PALACIO, M. (2005) "La cueva del Higuerón. Diario de excavaciones". Ed. Airón Sesenta. Málaga. PP:109.
  30. KLIMCHOUK, A. (2014) The methodological strenght of the hydrogeological approach to distinguishing hypogene speleogenesis. Hypogene Cave Morphologies, Special Publication 18. Pág. 4-12. Karst Waters Institute, Virginia.  http://karstwaters.org/wpcontent/uploads/2015/04/SP18_Hypogene1.pdf
  31. KLIMCHOUK, A. (2007) “Hypogene Speleogenesis: Hidrogeological and morphogenetic perspective”. Special Paper no. 1. National Cave and Karst Research Institute. Carlsbad.
  32. BERROCAL PÉREZ, J.A. (2016) "Sobre el origen hipogénico de las cavidades de la Araña y Rincón de la Victoria. Málaga. Rev. Andalucía Subterránea, 27. Pág. 24-31. Ed.. FAE. Málaga. 
  33. ROS, A.; LLAMUSI, L.; y SÁNCHEZ,  J. (Coord.) (2014) “Cuevas hipogénicas en la Región de Murcia, España”. Vol.1. Murcia.
  34. MERINO, A., GINÉS J. y FORNÓS,  J.J. (2011): “Evidencies  Morfologiques de processos hipogenics a cavitats de Mallorca”. Endins, #35 / Mon. Soc. Hist. Nat. Balears, #17: 165-182. ISSN 0211-2515. Mallorca.
  35. CONSUEGRA, S. (2005) "Olla neolítica de la cueva del Higuerón (Málaga)" En Pieza del mes. Museo Arqueológico Nacional. Madrid. PP-12